Fernando Gago puso a los mas experimentados en cancha ante Tigre. Hubo indulto para Sergio Romero y Pol Fernandez y se le devolvió la confianza a Marcos Rojo. El resultado: un categórico 3-0 en contra en Victoria.
El debut de Pintita no pudo ser peor. El bajo rendimiento mostrado por el equipo fue tan alarmante como lo mostrado en los últimos encuentros de Diego Martinez hace un puñado de semanas.
Si el DT queria sacarse dudas sobre el rendimiento de los experimentados en cancha, lo visto hoy en el estadio Pedro Dellayovana debió haber sido más que suficiente para tomar nota a futuro. Hay jugadores que no pueden dar más de lo que tienen o dieron en su momento. Algunos porque ya no les da el físico y otros porque tienen la cabeza en otro lado del planisferio.
Para colmo los arbitrajes te patean en contra. Las manos qué para Boca son sancionables, para los rivales no son causales para anular los goles que convierten. La doble vara ya es alevosa.
El primer tiempo a Cavani no le dieron un penal luego de haberse comido una piña en el área de Tigre, con el partido igualado en cero. En el área de Boca y, tras una pelota parada, hubo una doble mano de dos jugadores del Matador en ataque qué bastaron para acomodar la pelota que terminó rematando Nehuen Paz y metiéndose por detrás de Romero. Insisto los arbitrajes cuando quieren voltearte o beneficiarte, lo hacen sin sonrojarse.
Dicho ésto. El rendimiento colectivo en el PT fue un espanto. Anselmino y Rojo competian entre si, para ver quien de los dos dejaba más abierto el espacio en la defensa. El pibe que tiene un pie y el cerebro en Inglaterra siempre quedaba mal parado y llegaba a destiempo a todas las jugadas. Su compañero de zaga, no quería ser menos y era un peligro en cada pelota dividida.
El mediocampo con Miramon como único volante central la pasó muy mal con el juego que propuso Tigre en los pies de Gonzalo Maroni y compañía.
Arriba en ataque, el pobre de Merentiel padeció la decisión táctica de Gago de hacerlo jugar por las bandas y nunca pudo conectar con sus compañeros.
En el complemento, Fernando tomó nota y cambió de esquema. 4-2-3-1 con Medina y Miramon en el doble 5 y adelante de ellos Merentiel y a los costados Zenon y Aguirre. Así, el equipo mejoró y mucho. Tanto que hasta tuvo en varias chances el gol del empate, pero careció de puntería y hasta de suerte.
En el mejor momento de Boca, sale Zenon , que no estaba para salir, e ingresa Zeballos qué lo hizo bastante bien, pero no alcanzó para empatar el partido.
En los últimos minutos la pelota parada en contra otra vez volvió a rescatar la carencia defensiva de un Boca indefenso.
Nadie fue a buscar el rebote al poste y
Cardozo, en en una posición muy polémica convirtió el 2do para Togre. El Var lo convalidó y trazo líneas para que parezca habilitado. Déjenme tener dudas sobre su posición, señor lector.
Ya de yapa y en tiempo de descuento Anselmino y Rojo decoraron su noche nefasta habilitando al chico Medina que marcó el tercer gol para el equipo local. El 3-0 es tan contundente como preocupante.
Hacia mucho tiempo que un DT de Boca no caía por una diferencia de tres goles en contra en su debut oficial. A lo lejos llega el recuerdo del 1-4 a domicilio que le propinaria Godoy Cruz al Boca de Julio Falcioni en la Bombonera en aquel primer domingo de febrero de 2011. Miren sino pasó tiempo ya.
Fernando Gago deberá trabajar y mucho de cara a lo que viene. Tanto en lo táctico como en lo mental.
Fede Perez Rivero
@FedePR12