Jorge llega bajo un clima de mucha ansiedad en un ecosistema a punto de dinamitarse.
Los jugadores con un dejo de amargura y apatía despilfarrando oportunidades para pelear por el título de la liga y los dirigentes jugando al misterio con la elección del DT durante más de tres semanas.
Fue un primer tiempo ESPANTOSO el jugado por Boca. Sin conexiones claras entre el medio y los delanteros ni proyecciones de los laterales, en ataque el equipo de Mariano Herrón fue pobrisimo. Imagínense lo que fue en defensa.
Apenas se llevaban jugaods 40 segundos y a la salida de un bochazo con destino de área entre los pibes Valentini y Sandez hicieron un macanón. Uno la dejó picar y el otro la cabeceó para adentro del área chica. Ramón Ábila, le ganó la espalda al inocente de Advincula y cumplió con la inexorable ley del ex para posteriormente pedir disculpas de cara a toda la Bombonera.
No recuerdo una primera mitad tan floja… Ni en las peores momentos de Sebastián Battaglia y el Negro Ibarra. No hay dudas de que Mariano Herrón, en su última función como DT interino debía mover fichas en el entretiempo.
El complemento llegó y el ya ex técnico interino no movió fichas. Debió hacerlo cuando por lesión fueron cayéndose los soldados de papel que se pusieron el manto sagrado boquense. Adentro Villa por Briasco, Fabra en lugar Sandes y posteriormente Ramirez por Medina. Esos fueron los cambios para empujar a un Colón limitado que apiló jugadores en su campo para aguantar
De pronto una luz de esperanza, Óscar Romero disparó de media distancia ante la tibia resistencia del arquero Sabalero, Ignición Chicco que dejó la pelota escurrirse entre sus manos y así llegó el empate, que poco le duraría al Xeneize.
En tiempo de descuento y con el equipo mal parado llegó el segundo tanto de Colón para volver a apagar los ánimos de una Bombonera a punto de estallar.
Agustín Teuten cruzó todo el campo en soledad ante la nula reacción de Advincula y Romero que nunca retrocedieron y la derrota fue inevitable.
Mañana asume el ex DT del granate y Elche con un plantel bajo la lupa por los malos desempeños y la resistencia del varios hinchas, que no aprueban su arribo al club.
Boca está en un clima amargo y necesita de un almidón de azúcar para endulzar su presente y sobretodo su futuro.
Federico Perez Rivero
@FedePR12
