ATRÉVASE A SOÑAR

El Xeneize tenia los goles en el banco. El Negro Ibarra, puso al pibe Luca Langoni y el mocoso con dos golazos le dio el triunfó en un parrido clave ante Atlético Tucumán por dos tantos contra uno y ahora, a dos semanas para el súper, se prende en la lucha por la liga.

Era una final adelantada y Boca no podía perderla si quería pelear por el campeonato. El calendario y los resultados del fin de semana le habían hecho un guiño y el equipo, aún con altibajos, dio muestra de carácter para dar vuelta el resultado y quedarse con éstos tres puntos vitales para el futuro del torneo.

La gente que volvió a llenar la Bombonera y no es noticia por ello, porque es a lo que nos tiene acostumbrados el hincha de Boca, vivió el partido como lo que fue: una final anticipada y, aún en el desaliento, no dejó de mandar al equipo para adelante y apoyar a los cuatro costados de la Bombonera que volvió a ser una fiesta. El hincha se merece ser campeón.

Con la camiseta de Boca matar o morir, Ibarra lo sabe y hoy se la jugó con los cambios citó a mi amigo y colega, Gustavo Pereyra, quien al igual que yo destaca los cambios que realizó Hugo Ibarra para destrabar un partido que estaba cuesta arriba.

Fue un primer tiempo con mucha posesión de pelota y pocas luces para saber generar peligro. Es más las jugadas más peligrosas las tuvo el Decano que ya en 15 minutos ganaba con un cabezazo de Lotti que se anticipó a la marca de Figal luego de un pelotazo cruzado desde el sector derecho de la defensa boquense.

Boca jugaba realmente mal y no generaba peligro en él área tucumana. Pero en el complemento con el ingreso de los pibes la cara en ataque fue muy distinta Molinas y Langoni hicieron todo bien de tres cuartos de cancha para adelante y Boca se lo llevó por delante al líder del campeonato para ganarlo en los últimos quince minutos del partido.

A falta de dos semanas para el súper clásico suma triunfos y en las ganas de los pibes y el apoyo de la gente se anima a soñar con la liga.

Federico Pérez Rivero
@FedePR12