Boca venció por dos tantos contra uno a Platense con dos perlas del mellizo Romero.
Luego de una nueva semana de turbulencias en el mundo Boca, el equipo de Hugo Ibarra saltaba al campo de juego de la Bombonera con la obligación de ganar para cambiar la imagen del había dado en Paraná y también para achicar diferencias con Atlético Tucumán, actual líder del campeonato.
Era un partido muy trabado en el medio. Con Boca teniendo la posesión de la pelota, pero sin poder perforar la defensa de un Calamar bien parado y expectante para salir de contra.
En doce minutos Óscar Romero soltó la zurda con soberbia y la colgó en el ángulo de Marcos Ledesma para desatar la primera explosión de la noche.
El conjunto local tenía la pelota y las mejores chances. Juan Ramirez y nuevamente el 10 paraguayo habían inquietado con remates defectuosos entrando al área. Finalmente a falta de cinco minutos para irse al entretiempo, Boca aumentó la diferencia.
Sebastian Villa puso quinta a fondo y luego bailó arriba de la pelota esperando a un Romero que llegó en soledad al área chica para asistirlo con categoría. El mellizo sólo tuvo que poner la cabeza para aumentar el score.
En el entretiempo el equipo de Omar De Felippe adelantó las líneas y atacó más a un Boca más replegado. Pese a ésto, antes de los cinco minutos Villa exigió con un remate de media distancia a Ledesma que mandó la pelota al córner.
En diez minutos, Morgantini descontó, ante la apática marca de la última línea boquense y le puso suspenso al partido.
El Calamar sin hacer mucho se ponía en partido e inquietaba a una Bombonera que nunca dejó de alentar.
El equipo local tuvo chances para liquidar el partido pero no logró hacerlo y terminó sufriendo por demás un partido que había logrado destrabar rápido.
Con el triunfó de hace instantes y mientras espera la llegada de Edinson Cavani, el Xeneize comienza a acomodarse en la tabla y le descuenta puntos a los animadores del campeonato.
Fede Perez Rivero
@FedePR12